Memorias de Emilio, 2 abril
Joaquín ha encendido mi pasión como nunca nadie lo había
hecho. Daría mi vida por tener sexo con él. Sería increíble que él fuera quien
me desvirgara ¡qué maravilla¡ El deseo que me ha hecho sentir me ha animado a
jugar a la lotería. Ojalá tuviera dinero para pagar un rato con él y el hermano
pero no me puedo quejar. Le he vuelto a comer la verga a Joaquín. He vuelto a
gozar del tierno cuerpo del hermanito de Ian. Mi fantasía de poder tenerlo en
mi totalidad es del todo imposible pero tengo una vez más el sabor de su leche
en mi garganta. No es que sea algo delicioso pero he bebido de él. Es algo muy
íntimo, algo que me gusta haber hecho con él. He probado la leche de los Gaitán
y eso me encanta. Joaquín es demasiado joven pero ¡¡cómo me hace gozar, que
verga tiene¡ Tiernecita pero bien sabrosa¡ Nunca hubiera pensado que ese
chiquillo de 18 años me despertara una
pasión que ni su hermano. Hacía Ian siento más amor. Recuerdo aquel jovencito
que en hace 5 años me enamoró con su culazo. Nunca habría imaginado que estaría tan
presente en mi vida, que tendría unas fotos de él en mi habitación y sobretodo
que podría disfrutar del cuerpazo del hermano. Hoy se la he vuelto a mamar. De
nuevo es Hera la que ha ido a la biblioteca pero, aunque lo deseaba, no creí
que tuviera suerte. Me vuelve loco, no me puedo resistir. Me estoy arriesgando
demasiado pero lo he visto llegar y he ido detrás de su culito cuando iba al
lavabo. Creo que a él no le ha gustado que le siga. Debe tener miedo que sea
una acosadora o algo así.
“no te di bastante leche ayer?” –me dice algo brusco.
Y el deseo me hace más fuerte. Estaba demasiado cachondo.
--de ti y tu leche nunca tengo bastante.
Sé que a él le gusta que lo desee pero no que lo
presione.
--tengo novia –me dice.
Yo me he puesto sensual, coqueta.
--no espero casarme contigo. No me interesa.
Él me ha mirado serio y me ha dicho:
--¿y qué es lo que quieres de mi?
Excitado, pero con algo de vergüenza, le he dicho que
sólo lo mismo que ayer. Me ha guiñado el ojo, Me ha dicho con una voz tan
sensual que me ha puesto a cien que soy una viciosa. Estoy muerta con él.
--si no hay gente te aviso pero en el futuro prefiero que
no me busques, deja que sea yo quien te busque.
--si claro por favor. Yo haré lo que tú quieras.
Me he puesto a su servicio bien sumisa y a él le ha
gustado. Encerrados en el baño se ha bajado los jeans y los bóxers hasta los
pies. Se ha sacado la camiseta y yo me he vuelto loco de gusto. No me ha dejado
que le toque mucho el culo pero ayer sólo se la sacó. Ahora lo he visto desnudo
y ha sido una locura. Lo mejor de mi vida, que ganas de violarlo. Tengo miedo
de intimar con él y que me pida algo que yo no le puedo dar, que me descubra.
Sé que me debería conformar con lo que tengo pero me provoca demasiada ansiedad
como para renunciar a él. Su leche recién pasaba por mi garganta lo he invitado
a tomar algo.
--no, he quedado con mi novia –me dice brusco mientras se
sube la ropa.
Me ha mirado con reproche. Él no quiere que yo tome la
iniciativa y creo que le he fallado, que se ha sentido presionado. Mientras se
arreglaba la ropa le he preguntado si nos volveremos a ver.
--No creo. Ya te di el gusto –dice serio.
Yo le he dado las gracias por todo pero él no me ha
contestado. Estoy feliz pero a la vez frustrado por no tener más de él. Es
curioso, hace unas semanas soñé que tenía un hijo que se llamaba Joaquín. En
aquel momento era un nombre que no significaba nada para mi y no entendí el
sueño. Joaquín es tan sensual. Es un nombre de macho. Un nombre que nunca me
habría gustado y que ahora me sabe gloria. Es curioso, lo del sueño sería una
señal de este momento que estoy viviendo ahora. Joaquín ha aportado alegría a
mi vida. Tengo todas sus fotos más sexy imprimidas y serán mi alegría en mis
momentos de soledad."*
--para la más bella flor –le dice dulcemente.
Se siente culpable por lo de Hera. Está viviendo algo
hermoso y no quiere estropearlo por una tontería como lo de Hera. Caminan por el
bosque. Ella tiene los ojos cerrados con una venda. Los dos están muy contentos
de estar juntos.
--¿Dónde vamos? –pregunta ella.
--es una sorpresa por nuestra primera semana.
Elena señala la sencilla pulsera que lleva en su muñeca.
--ya tengo bastante
con la pulsera que me diste el mismo día. Es la pulsera más bonita del
mundo.
Joaquín se desvive por hacer feliz a Elena y le gusta ver
que ella está respondiendo con amor. Dentro de los jóvenes está naciendo un
sentimiento hermoso y ambos lo disfrutan mucho. Joaquín es muy dulce con ella.
--ya llegamos.
Joaquín le saca la venda de los ojos. Ella no entiende
qué hacen allá pero están delante de un árbol precioso. Un gigantesco árbol de
más de cien años. Joaquín le señala algo. Están
grabados en el tronco el nombre de los padres de él. Saca una navaja y dice:
--me juré que cuando encontrara a la mujer de mi vida la
traería aquí.
Joaquín graba su nombre en el árbol ante la emocionada
mirada de Elena y luego el de él. Se miran con cariño. Después de acabar su
obra, Joaquín besa a Elena con deseo. Ella lo abraza, se aferra a él.
--¡nunca he sido tan feliz¡ --ella.
Joaquín sonríe con orgullo. Nunca se sintió tan querido,
amado y eso le hace feliz.
--te amo y esto no se lo dije a nadie.
Elena llora y se queda abrazada a él. Joaquín le acaricia
las lágrimas.
--te voy a hacer tan feliz que nunca vas a querer
separarte de mi --él.
Se besan cálidamente durante un buen rato. Luego,
abrazados frente al árbol, miran sus nombres gravados.
--esto es para siempre –él.
Elena lo mira enamorada.
--como nuestro amor.
Se vuelven a besar. Se agarran de las manos.
--ahora estamos unidos de por vida –él.
Joaquim besa a Elena con intensidad, desea hacerle el
amor. Elena lo ama y lo desea. Sí, sería muy bonito hacer el amor en ese mismo
momento pero no está segura. Para a Joaquín que quiere desnudarla.
--ahora no.
Él la mira sofocado.
--¿es que no me amas?
--¡mucho y ¿tú?
Joaquín la sonríe. La está amando como nunca ha amado a
ninguna otra y la mejor manera de demostrárselo es no presionarla. Se aparta de
ella. Ya no le interesa el sexo sino es con Elena. Ahora es algo más allá del
puro placer físico. Joaquín la devuelve a su casa sana y salva. Van en moto.
Los dos se sacan el casco y se besan. Elena ha querido ser prudente para que su
familia no se entere que tiene novio pero está loca por Joaquín y se olvida de
todo.
--¿¡¡pero qué escándalo es este¡
Una chica los interrumpe.
--es mi hermana, María –dice Elena separándose de Joaquín
avergonzada.
María no soporta ver al hermano de Ian junto a su
hermana.
--¡te prohíbo que te vuelvas a ver con él¡
--¡tú no eres nadie para meterte¡ --dice los dos novios a
la vez.
María bofetea a Joaquín y aparta a Elena de él.
--¡vete de mi casa¡¡ si te vuelvo a ver con él le contaré
a los viejos para que te lleven a un internado.
María se lleva a Elena arrastras. Elena no entiende nada.
--¿¿porqué me haces esto?¡¡
--¡es un desgraciado, ya me lo agradecerás algún día¡
Elena trata de luchar contra su hermana que la va
arrastrando hacia la puerta.
--¡te amo, te amo¡ --dice Elena mirando a Joaquín
suplicante.
Joaquín no sabe qué hacer. No sabía que Elena era la
hermana de la chica con la que se estrenaron tanto él como su hermano.
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